Quisiera saber qué ganas con todo esto. Con este juego perverso de adivinar si aún te amo, si aún te extraño. ¿Con qué fin?, si eso sólo acarrea tristeza, nostalgia y desilusión?... No. Basta de querer robarme la sonrisa, de jugar a ser el dueño de mi alma, tiré el tablero y cambié las fichas de esta ronda… no quieras pisarme una vez más. Es cierto, nadie me dislumbra ni me despierta interés, nadie puede quitarme del alma este gusto amargo… pero a quién debería culpar? Si esta vida es sólo mia, si soy la autora del guión de mi destino… no voy a seguir tus pasos y a justificar cada uno de mis errores jugando a la victimización barata, NO. Si se dio y se dá así, será como deba ser, y aunque mi ser no aguanta este incontrolable impulso del necesitar confrontarte y preguntarte mis mil por qués, me daré la media vuelta y jugaré al no saber, al no querer como a una droga esa verdad que sólo tus palabras me pueden anunciar… Yo que tanto deseaba ser parte de ti y que tú lo seas de mí, renunc
todo tiene razón de ser...